El Secreto de la Felicidad
El secreto de la felicidad
Ayer tuve la oportunidad de charlar con Angélica, periodista del diario de Burgos, sobre el trabajo que hacemos aquí en el centro El Factor Humano, y al hablar de la actividad del laboratorio de la felicidad me hizo la siguiente pregunta:
“¿Si tenéis un laboratorio de la felicidad, entonces, conocerás el secreto de la felicidad?”
El artículo de hoy lo dedico a la respuesta a esta pregunta y a compartir con vosotros el secreto de mis momentos de felicidad. Todo ello, eso sí, con el deseo de que encontréis vuestro propio secreto.
Y es que creo, que si en realidad existe un secreto, no es porque sólo unos pocos lo sepan, sino porque no nos hemos parado a ver la felicidad que ya existe en nuestras vidas y a aprender de ella.
“La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días.”
Benjamin Franklin
Todos hemos experimentado momentos de felicidad en nuestras vidas, de ahí que esté convencida de que la felicidad está al alcance de todos. Y a la vez también ocurre que el mayor obstáculo para experimentar felicidad en el día a día somos nosotros mismos.
Estas son algunas de las zancadillas que nos ponemos a nosotros mismos y que limitan nuestros momentos de felicidad:
- Creemos que la felicidad está condicionada a las circunstancias externas. Es decir, creemos que no depende de nosotros y que estamos a expensas de la suerte o de que las cosas nos vayan bien.
- Ponemos nuestra atención con más frecuencia en aquello que va mal y que necesita arreglarse, que en aquello que va bien y que podemos pararnos a apreciar y agradecer.
- Limitamos la felicidad a aquello que nos provoca alegría y nos olvidamos de que también podemos sentir felicidad a través de la satisfacción personal, la tranquilidad y calma interior, el juego, el disfrute,…
- Buscamos el secreto de la felicidad en los libros, en la teoría, y aunque creemos en lo que leemos no pasamos a la práctica, que es donde reside la sensación de felicidad.
La mejor forma de avanzar hacia el secreto de la felicidad es:
- Responsabilizarnos de crearla en vez de esperar a que nos ocurra.
- Pararnos a echar una ojeada a nuestra vida con el fin de ver cuáles han sido nuestros momentos más felices y aprender de ellos. Para ello nos podemos preguntar: ¿qué es lo que había en esos momentos que me permitía sentir felicidad?
La respuesta a esta pregunta contiene la clave, o el secreto, para cada uno de nosotros.
Así, para algunos, la felicidad vendrá dada de la mano del riesgo, o de tiempo a solas y en silencio, o de hacer trabajos manuales, o del ejercicio físico, o de una charla con los amigos, o de una comida exquisita, o de decorar una habitación,…
Son muchos y muy variados los momentos de felicidad y si tenemos claro qué es lo que nos hace sentir felicidad tendremos en nuestras manos el poder de crearla.
Para finalizar, os dejo con el secreto de algunos de mis momentos de felicidad:
Me hace feliz creer que formo parte de algo más grande que yo y que mi contribución a ese algo es importante y necesaria.
Me hace feliz buscar el silencio y la soledad para pasar un rato conmigo misma.
Me hace feliz aprender cosas nuevas que me interesan y compartirlas con cuantas más personas mejor.
Me hace feliz abrir mi corazón a las personas con las que trabajo y la satisfacción de dar lo mejor de mí.
Me hace feliz tener conversaciones con mi sobrino de año y medio en ese idioma tan especial que sólo él conoce.
Me hace feliz pasear por el campo,
bailar y dejar que mi cuerpo se exprese como quiera,
una buena comida con personas queridas,
viajar y aprender de otras culturas,
un buen monólogo,
reírme a carcajadas,
hacer el tonto,
escribir en mi diario de gratitud,
soñar,…
¡¡¡Os deseo un muy feliz día!!!